Un día después, después de vos, crucé los dedos. La barqa pasó i el río qedó, al fin, qieto. Sólo un cuento fue qe ayudo a pasar un buen rato. Un castillo de naipes cayó i palabras baratas. En el aire entre los dos, brilló una copa rota, mala suerte mi palma dió un destino oscuro. Un dulce licor de romero, fue la mala idea loca. No sueño más con vos, ya cayó una flor del cielo. Te voi a robar ésta canción de amor i de consuelo.
Apostamos mal, serás más feliz vagabundeando. Mui poqo amable fui, nada nuevo vi en tu ojos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario